"Gato Negro"

GATO NEGRO (Argentina/2013). Dirección y guión: Gastón Gallo, Fotografía:Claudio Beiza. Edición: Francisco Freixá. Músico: Iván Wyszogrod. Dirección de arte: María Eugenia Sueiro. Elenco: Luciano Cáceres, Luis Luque, Leticia Brédice, Roberto Vallejos, Lito Cruz, Favio Posca, Paloma Contreras, Guillermo Arengo, Germán De Silva. Distribution Company. Duración: 120 minutos.

Gato Negro cuenta la vida de Tito Pereyra, un chico argentino que viene de Tucumán en 1956 que abandona a su madre criado en la pobreza y su niñez marginada, para llegar a la metrópoli porteña cuyos contrastes con su rebeldía y su conflicto interior de ansiedad y ambición permanente marcarán su destino de manera particular.
En ése transcurrir toma decisiones que le cambiará la vida para siempre como un ser humano lleno de luces y sombras, la vida lo llevará como un sobreviviente desde su infancia a la adultez, luchará por torcer su destino en una sociedad que le es hostil, impulsado con su enorme esfuerzo y ambición logrará abrirse camino como personaje que se mueve con gran omnipotencia, lo que le permitirá crecer arriesgándolo todo, tendrá un final imprevisible.

En la gran metrópoli vivirá de adulto en un conventillo compartiendo su habitación con ladrones que sueñan con el robo perfecto, sin embargo Tito prefiere trabajar en las fábricas, pero siempre atento a cualquier oportunidad en su afán de progresar, y no se preocupará si ésos avances son lícitos y no dejará de participar en negocios turbios.
La cuidada dirección de arte en Gato negro reconstruye la primera mitad del siglo XX

hasta entrado el gobierno de Alfonsín, donde en ésa épocas se suceden una cabalgata de costumbres, modas y vaivenes político-sociales que el film remarca en busca de una construcción que tuviera también anclaje en la historia argentina reciente.
El cine argentino contemporáneo se encuentra mucho más vinculado a la urgencia cotidiana que a la reconstrucción histórica, con lo cual éste esfuerzo es loable en su matriz visual y debe valorarse, donde la épica del hombre común y la ambición desbordada se conjugan como elementos del relato, pero ahí el film del debutante director Gastón Gallo naufraga por exceso de ése relato de su protagonista, que tendrá la oportunidad de depurar su estilo hacia un camino promisorio al dejar una primera buena factura. Lo secundan al personaje algunos buenos intérpretes secundarios con carisma como Juan Acosta, Pompeyo Audivert, Eduardo Cutuli.